¿Cómo quitar chicle de la alfombra o tapicería?

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Cuando un chicle cae en la alfombra o en un mueble tapizado, este empieza por pegarse en la superficie. Conforme pasa el tiempo, el chicle penetra en las fibras de la tela cuando la gente pisa o se apoya sobre él. Conforme más penetra el chicle, se vuelve más difícil quitarlo. Por esta razón es recomendable darse a la tarea de quitarlo lo antes posible.

Hay que ser muy cuidadosos al intentar quitar chicles de alfombras o tapiciería. Es tan importante quitar el chicle como proteger la superficie sobre la cual está pegado. Algunas veces, en el afán de quitar el chicle, podemos realizar un procedimiento demasiado agresivo que puede dañar la alfombra o la tela. Por esta razón se recomienda empezar por lo más sencillo y después seguir adelante.

Empieza para raspar el chicle de la alfombra

Es el procedimiento más sencillo y definitivamente es por el que debemos de empezar. Buscar una herramienta con punta o un lado ligeramente afilado. Utilizarla para raspar cuidadosamente el chicle. No pase más de unos segundos tratando de quitar la goma de mascar de la alfombra o tapicería. Si no tiene éxito entonces pase al siguiente paso.

Utilizar calor para suavizar chicle

Puede utilizar una plancha o una vaporizadora para ablandar el chicle y poderlo quitar físicamente.

Antes de intentarlo, es importante hacer una probar que la alfombra no se dañe o decolore con la aplicación de calor. Para ello hay que buscar una zona poco visible. En una alfombra podemos intentar sobre un área cubierta por un mueble. Para un sillón podemos buscar una esquina en la parte de atrás. Posteriormente hay que aplicar muy poco calor y checar si la superficie sufre algún daño. También hay que corroborar que los colores de la alfombra o tapicería no pierdan su fijación. Para ello hay que presionar una toalla de algodón blanco sobre el área calentada. Si después de un rato no se transfiere color a la toalla, significa que la superficie si resiste el calor que aplicamos.

Disolver la goma de mascar con disolventes.

Antes de probar cualquier disolvente, hay que leer las instrucciones cuidadosamente y probarlo en un área no visible. Hay que poner especial atención en la forma de aplicarlo, el tiempo de aplicación y confirmar si hay que realizar un post-tratamiento.

Forma de aplicarlo: Simplemente hay que seguir las instrucciones. Algunos se aplican directamente. Otros hay que rociarlos sobre un trapo y después frotar el área. Con frecuencia hay que tallar un poco después de aplicarlo. También hay que tener cuidado de no usar demasiado disolvente. No funcionará mejor por aplicar mucho.

Tiempo de aplicación: La mayoría de productos requieren cierto tiempo para disolver la goma de mascar. Si lo quitamos antes, probablemente nos decepcionaremos ya que no quitará el chicle. Dejarlo demasiado puede dañar la superficie.

Post-tratamiento. Existen disolventes volátiles y otros no volátiles. Los primeros se evaporan a diferencia de los segundos. Éstos últimos requieren de un post-tratamiento para retirar los residuos del disolvente de la superficie donde los aplicamos.

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